lunes, 5 de enero de 2009

14 x 8.000 con Edurne Pasabán

Hasta hace tan sólo 22 años, ningún ser humano había conseguido escalar las 14 cumbres más altas del planeta. Fue el 16 de Octubre de 1986 cuando Reinhold Messner, considerado por muchos como el mejor himalayista de todos los tiempos, completaba la ascensión a los catorce ochomiles sin utilizar oxígeno y al estilo tradicional. A día de hoy, tan sólo 14 hombres han conseguido escalar las 14 cimas más altas del mundo. Por el contrario, ninguna mujer ha logrado este objetivo por el momento, aunque tres están muy cerca de superar este reto: Edurne Pasabán, Gerlinde Kaltenbrunner y Nives Meroi. Todas ellas tienen todavía tres cimas pendientes. A la austríaca Gerlinde Kaltenbrunner le quedan por coronar: Kangchenjunga, Shishapagma y K2. A la italiana Nives Meroi le restan: Kangchenjunga, Makalu y Annapurna. Y a la española Edurne Pasabán el: Kangchenjunga, Annapurna I y Shishapangma. Desde aquí les deseo lo mejor a las tres y que sus sueños queden cumplidos.


Edurne Pasabán Lizarribar nació el 1 de agosto de 1973 en Tolosa (Guipúzcoa), España. Es ingeniera técnico industrial y MBA por la Business School de ESADE en Barcelona. Trabajó durante varios años en la empresa familiar dedicada a la construcción de maquinaria. En la actualidad, dirije un restaurante/casa rural en la población vasca de Zizurkil. Además, ejerce de consultora y conferenciante para empresas en el ámbito de la motivación, planificación y trabajo en equipo, utilizando los conocimientos y experiencia adquiridos por las situaciones límite vividas en sus expediciones al Himalaya.

Su afición por la montaña le viene desde muy joven. En 1989, con 16 años, viajó por primera vez a los Alpes, donde ascendió al Mont Blanc (4.810 m), al Cervino (4.478 m) y al Monte Rosa (4.614 m). Con 17 años, subió a la cima del Chimborazo (6.310 m), en los Andes. Desde entonces ha demostrado que cuenta con las aptitudes físicas y mentales necesarias para llevar a cabo expediciones de semejante envergadura.


En el año 2001 realizó su primera gran ascensión, alcanzando la cumbre de la montaña más alta del planeta, el Everest (8.848 m) e iniciando así las ascensiones al Himalaya. En la primavera del año siguiente, 2002, subió al Makalu (8.463 m), y en otoño de ese mismo año, al Cho-Oyu (8.201 m). En 2003, también en primavera, escaló el Lhotse (8.516 m), y a finales de julio, y en 7 días, llegó a la cumbre del Gasherbrum II (8.035 m) y del Hidden Peak (8.068 m), también conocido como Gasherbrum I. En julio de 2004, consiguió coronar la cima de la segunda montaña más alta del mundo, el K2 (8.611 m) y seguir con vida, rompiendo así la maldición que parecía pesar sobre sus antecesoras, pues todas las mujeres que habían alcanzado la cima del K2 hasta el momento, murieron en su descenso o escalando otros ochomiles. La conquista de esta montaña tuvo un alto precio para Edurne, pues le costó la amputación por congelación de las falanges de dos de los dedos de los pies. Aún fue más alto el precio para su compañero de expedición Juanito Oiarzabal (mejor himalayista español de todos los tiempos) pues le supuso la amputación de prácticamente todos los dedos de los pies. A pesar de estas lesiones, Edurne subió a la cima del Nanga Parbat (8.125 m) en julio de 2005, y escaló el Broad Peak (8.047 m) en verano de 2007. En mayo de 2008, coronó el Dhaulagiri (8.167 m) junto al ecuatoriano Iván Vallejo Ricaurte, quien con esta ascensión conseguía su sueño de coronar las 14 cimas más altas del mundo. El último ochomil conquistado por Edurne fue el Manaslu (8.163 m), a principios de octubre de 2008.


Actualmente Edurne se encuentra preparando su próxima expedición, con el objetivo de conquistar el Kangchenjunga (8.568 m), la tercera montaña más alta del mundo. De conseguirlo, únicamente le restarían por conquistar el Annapurna (8.019 m) y el Shisha Pangma (8.046 m). Quizás en ese momento Edurne Pasabán se convierta en la primera mujer en el mundo que alcanza los 14 ochomiles, las 14 cimas más altas del planeta. Esperemos que así sea, y que entre tanto, la Diosa Madre del Mundo la proteja en su camino.

Vídeo de Edurne en la cima del Broad Peak (8.047 m) en julio de 2007:

1 comentario:

Javier dijo...

Pues hay que desearles toda la suerte del mundo a estas tres intrépidas mujeres. Desde luego hay que tener una mantalidad muy especial para ponerse a subir montañas de esa manera y jugarte la vida en el empeño. Salir de esto con los 20 dedos del cuerpo está claro que es una hazaña... :)